jueves, 13 de diciembre de 2007

El falso profesionalismo y la red de amantes del teatro

El día 20 de Noviembre publiqué esta parte de lo que era una carta a la autora argentina Laura Leone, como resultado de varios mensajes privados en Neurona.
Poco después lo publiqué también en Netlog, tanto en mi blog como en los 2 clanes teatrales iniciales.

Hola, Laura, la verdad es que me agrada mucho tu respuesta, por tu comprensión, tu flexibilidad y por brindar tu colaboración.


UN TÉRMINO DEVALUADO

En cuanto al término "profesional" te puedo decir que hay una clara distinción en la tradición española, según la cual los profesionales eran los actores del teatro comercial y el resto eran aficionados.

Cuando en los últimos años del franquismo se fue extendiendo y sobre todo consolidando el teatro independiente en España, con el conjunto de cambios mentales que eso conllevó, se fue cuestionando esa definición, pues la compañías de este tipo de teatro ya empezaron a presentar espectáculos no sólo dignísimos, sino en ocasiones superiores en dedicación, análisis y calidad a los del comercial. En ese sentido hay una cultura del teatro independiente en donde se afirma que nosotros a veces (o casi siempre) tenemos más "profesionalidad" (entendido en el sentido de excelencia que tú
mencionabas, no necesariamente como remuneración) que los llamados profesionales (los que cobran un sueldo en el comercial).
Me consta que en Argentina, pues he hablado con más de un director de allí, aún se mantiene con bastante vigencia esa noción, pero hay que ser sinceros: en España ya no. En España todo volvió a su cauce: los profesionales son los que cobran y viven de eso, nadie más. El único criterio es el económico.

Como los antiguos miembros del teatro independiente español han caído todos en ese pantano conceptual, en una ocasión llegué incluso a oír esta frase apta para ser incluida en una antología del cretinismo: "Pero tú también trabajas con aficionados, así que no eres profesional".

Es de ese tipo de frases que te obligan a ponerte a la defensiva y
justificarte, o decides contra-atacar: "En la mayor parte de esos
casos, lo hago cuando una empresa o institución me contrata y me paga por montar algo con aficionados, y en el resto de casos es porque ME DA LA REAL GANA de reunir a un equipo de amantes del teatro y sin necesidad de estar pensando qué va a cobrar cada uno, nos embarcamos en un proyecto artístico que en el mundo "profesional" nunca saldría adelante. Quédense ustedes con lo de "profesional", que yo voy a recuperar el término de "creador artístico".

Por eso puse la entrada en el Foro acerca de la profesión y la
vocación. ¿Cuándo un poeta dejó de escribir porque no le pagaran sus poemas? Casi la totalidad de los músicos de jazz harían gustosos una jam-session sin preocuparse de posibles remuneraciones con el solo aliciente de tocar con otros músicos con quienes puedan crear una atmósfera mágica, pero los "profesionales" del teatro español (en su mayoría muertos de hambre) no quieren oír hablar de creatividad y de puro placer artístico como no haya una negociación salarial o remuneratoria detrás, cosa que yo haría con una empresa de espectáculos, con una institución pública, etc. pero no necesariamente
con un compañero creador que proponga una idea sugerente.

Estando así las cosas, un servidor, que fui una de las primerísimas personas que pudo vivir del teatro aquí en las Islas Canarias y que estuve así bastante más tiempo que casi todo el resto, me fui desmarcando de todo ese ambiente de lo que llamo el "falso profesionalismo", hace dos años renuncié a prolongar mi contrato con la municipalidad de la capital, donde llevaba dirigiendo por 3 temporadas a una compañía, ocasionalmente con obras que NO me motivaban, monté una empresa con la que regresé después de casi 20 años al mundo de la tecnología (remunerada), y reflexioné que sólo hay
una palabra para justificar la actividad teatral: vocación.
Y después de un año "sabático" volví a fundar otra compañía
(localizada) para la que actualmente estoy diseñando un espectáculo de teatrap.

(Tengo incluso imaginado un cuestionario CRUEL al que someter a cualquier compañero teatral que pueda ser tan incauto como para soltar la palabra "profesional" delante mía, pero mi tradicional compromiso con los más desfavorecidos de la sociedad me impide divertirme de ese modo, jejeje.)



ENGANCHAMOS CON LA RED
Esta es una iniciativa que vengo madurando desde hace varios años y está dirigida a los amantes del teatro, independientemente si son espectadores o protagonistas del hecho teatral, si son aficionados, o estudiantes, o tienen un segundo (o primer) empleo, para mí vale cualquier aproximación, incluso la de los profesionales de siempre y la de los enfermos de "subvencionitis". Si llegan a la red con los esquemas actuales, se encontrarán con los mismos techos de siempre,
debido principalmente a su propia incapacidad para cambiar los moldes mentales. Que cada cual busque a sus afines. Por mi parte, aprovecharé la red para localizar y emitir propuestas que me satisfagan y montarlas con personas con las que me pueda entender en un momento dado.

La red está principalmente concebida para darle alas a esa legión mayoritaria de personas creativas que quedan excluidas o
semi-excluidas con los actuales mecanismos piramidales, pero no se negaría a participar en ellos, ni rechazaría a nadie por sus
planteamientos en política cultural, o por sus ideas acerca de los
modelos de financiación, ni por la estética o contenido de sus obras.
Que un monje franciscano reestrene un auto sacramental del siglo de oro con los muchachos de la parroquia y, a la vez, un pornófilo monte un show erótico. Que cada cual busque a sus afines. Por mi parte, quizás prefiera hablar de la nostalgia del tiempo vivido y busque por la red alguien que quiera interpretar "La última cinta" de Samuel Beckett con una nueva cadencia rítmica que se me ha ocurrido. En todo caso, si localizo a ese actor en tu país y nos ponemos de acuerdo en temas creativos y en las perspectivas de circulación del espectáculo (dónde, disponibilidad, a qué precio lo ponemos, etc.), pues tendremos que utilizar el método Computeatrix (uno de los fundamentos de esta propuesta) que vengo explicando en NetLog. O quizás opte por una comedia de enredo, vaya uno a saber.

Lo fundamental es que la red funcione con esquemas realmente
contemporáneos (que fueron creados por el Proyecto GNU cuando éste fundó el Movimiento por el Software Libre) desatando los actuales nudos típicos de la estructura productiva del teatro y creando "nodos productivos transversales" y después ajustar los canales de distribución a la nueva realidad, incluyendo la noción de público no como una entidad ajena a la red, sino integrada orgánicamente en ella.

Pero eso exige en varios aspectos centrales algunas modificaciones de hábitos mentales y organizativos. Algunos son tan previsibles que se presentarán a la primera oportunidad, por ejemplo estos dos: la necesidad de superar los actuales modelos oficiales de gestión de los derechos de autor y los de tránsito entre fronteras nacionales. Pero bueno, eso tampoco es nada nuevo, está permanentemente en la agenda de otros fenómenos sociales, como la distribución de música grabada y la emigración masiva entre países.

En estos temas, que cada cual se desembarace de telarañas mentales al ritmo que quiera, pero yo creo que el final del camino ya es bastante visible: supresión de las SGAEs y las Argentores (al menos en su actual configuración); supresión de las fronteras nacionales (al menos en su actual configuración). El mundo va hacia eso. Dicho con otros términos: libre tránsito del flujo creativo, libre tránsito del flujo humano (lo que no implica necesariamente gratuidad ni dominio público).

Sin asumir estas nociones va a ser muy difícil construir una red
transversal y deslocalizada. Pero que cada cual se tope con esta
realidad según le vaya en la historia.

Quedan más cosas por explicar, por ejemplo tres vías de financiación que tengo en la cabeza (aparte de las tradicionales de taquilla, caché, subvenciones y subsidios, pasar la gorra, etc.), pero ya seguiremos hablando de los "fundamentos" de la red más adelante.


TUS TEXTOS
Si tienes una obra, me encantará saber de ella y hablar contigo de cómo insertarla en la red. Quizás hasta podría suceder que fuera el primer texto de esta nueva "laurora" teatral. ;-)


Un abrazo

1 comentario:

HB dijo...

Hay comentarios varios a este artículo en las entradas de Netlog